Los responsables de Interior de los estados federados alemanes han decidido reforzar la vigilancia a la iglesia de la Cienciología y revisar las posibilidades para su prohibición en Alemania.

En una conferencia presidida por el titular federal de esa cartera, Wolfgang Schäuble, los ministros acordaron solicitar a los servicios policiales y de inteligencia que velan por el orden constitucional que recaben toda la información posible sobre las actividades de la cienciología.

"El año próximo, una vez tengamos esa información sobre la mesa, decidiremos la posibilidad de tomar acciones legales", adelantó el responsable de Interior del estado federado de Baden-Württemberg, Heribet Rech.

Su colega de Schleswig-Holstein, Ralf Stegner, declaró que la Cienciología, que se presenta como una Iglesia, representa una "criminalidad vulgar" y utiliza la manipulación en la captación de miembros y hace dependientes a quienes ya lo son.

La iglesia de la Cienciología, aunque con distinto grado de tolerancia en Alemania, está en el punto de mira de las autoridades desde 1997.

Entre tanto, la organización, a la que pertenecen numerosas estrellas de Hollywood, entre ellas el actor Tom Cruise, ha abierto centros en Baviera, Baden-Würtemberg y Berlín, y ya cuenta con unos 6.000 miembros activos en todo el país.

En España, la Cientología fue reconocida como Iglesia e incluida por una reciente decisión de la Audiencia Nacional, en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Justicia.

A por el partido ultraderechista

Además de aumentar la presión a la Cienciología, la conferencia ministerial de Interior, acordó seguir el mismo camino con el ultraderechista Partido Nacional Democrático Alemán (NPD).

Los ministros sostienen que el NPD, al igual que la Cienciología, persigue objetivos contrarios al orden constitucional establecido, y por ello acordaron seguir buscando vías legales para su prohibición.

"Todos estamos juntos contra la bestia negra", declaró el titular de Interior de Berlín, Ehrhart Körting, y agregó que mientras esa opción se hace tangible se revisará con mucha atención el entramado financiero del NPD con la esperanza de encontrar indicios de delito.

La intención es encontrar argumentos legales para reducir la extrema derecha sin necesidad de acudir al Tribunal Constitucional.

En 2003 esa instancia denegó una solicitud de ilegalización del NPD impulsada por las dos cámaras parlamentarias y el Gobierno.

El tribunal rechazó la demanda, tras un proceso que llevó dos años, al revelarse que buena parte de la información acumulada por los servicios de inteligencia procedía de confidentes policiales infiltrados en la cúpula de esa formación ultraderechista.